Las tradicionales potencialidades de la Comunidad Autónoma de Andalucía como región estratégica clave para la entrada de hidrocarburos (principalmente gas natural y petróleo) en la Península Ibérica se están viendo incrementadas e intensificadas dentro del presente contexto de crisis del orden internacional, de crisis medioambiental y de invasión de Ucrania por parte de una superpotencia energética como Rusia, respecto a la cual Europa presenta una elevada dependencia energética, particularmente en lo que respecta al gas natural.
La relevancia de Andalucía en términos de territorio de tránsito de hidrocarburos -que continúan primando en el mix energético mundial- a través de gasoductos y oleoductos es incomparable con la de cualquier otra región española o portuguesa, y sólo resulta comparable con la de algunas regiones europeas, dadas las conexiones internacionales de los Gasoductos Medgaz y Magreb-Europa (este último alimenta a su vez al gasoducto Al-Ándalus, al de Extremadura y a la línea nacional gasística de Portugal, y a la de la propia España), incluso con un eventual gasoducto Transahariano.
Andalucía posee además una de las redes más amplias de gaseoductos de España, y una red de entrada y distribución de gas natural licuado (GNL), que incluye importantes refinerías y puertos. Andalucía es, a su vez, relevante para la producción propia de gas natural (con el yacimiento marino de Poseidón, en el Golfo de Cádiz), así como en términos petrolíferos, que incluye una extensa red de oleoductos, refinerías e instalaciones portuarias, aeroportuarias y de almacenamiento. Este rol clave en el panorama energético se ve acentuado con su elevado potencial para convertirse en una región líder en fuentes de energías renovables.
La Estrategia Española de Seguridad Nacional 2015 concibe la seguridad energética nacional como una acción estatal que garantice un suministro energético sostenible a nivel económico y medioambiental. Andalucía no sólo se ve implicada en la seguridad energética por su condición de Comunidad Autónoma, sino por su posición geoestratégica como conexión entre Europa y África.
El proyecto tiene como objetivo principal estudiar las potencialidades de Andalucía para la seguridad energética de Europa ante la crisis del orden internacional, así como las tendencias actuales y perspectivas de futuro. Los objetivos específicos son tres:
1) analizar el estado actual de la producción y abastecimiento energético en Andalucía,
2) estudiar tendencias futuras de la evolución del panorama energético andaluz, y3) elaborar propuestas de políticas públicas en materia de energía que puedan contribuir a mejorar la seguridad energética de la región, de España y de Europa.
