Las mujeres son más del 50% de la población. Sin embargo en los entornos rurales, incluso los más urbanos, han seguido estando relegadas tanto en la toma de decisiones como a aquellas tareas relativas al sostenimiento familiar más silenciado. Para el entorno rural las oportunidades laborales y de empoderamiento personal de las mujeres  significarán un gran avance en la lucha contra la despoblación. Ni todas las mujeres son iguales, ni tienen la misma formación o aspiraciones, al igual que los hombres. No obstante  sí hay que hacer especial hincapié para continuar haciendo efectiva su presencia en el ámbito social y económico. Los programas de apoyo a este cometido deberán adecuarse a los diferentes perfiles socio-educativos de las mujeres para avanzar en la importancia de su contribución. No es solo una cuestión de justicia social sino de eficiencia y eficacia económica. En la Comarca de Baza "la asociación de mujeres empresarias está muy bien cohesionado, siendo una de las asociaciones de la Comarca mejor organizadas y de mayor contenido", según las opiniones de los hombres que han trabajado en los grupos de trabajo de la Agenda Urbana. Sin embargo la participación de mujeres en estos grupos ha sido minoritaria. Esto es una muestra más de la motivación de este  objetivo.